El tripartito defiende que adjudicó la escuela de verano a la oferta más barata

El equipo de gobierno de Catral defendió ayer la legalidad de la adjudicación de la escuela de verano. La empresa concesionaria «pertenece a un joven catralense que se ha atrevido a emprender una actividad y no formaba parte de ninguna lista electoral», afirman desde el tripartito, y añaden que «tampoco sería muy legal excluirlo por esta causa». Desde el gobierno municipal mantienen que el servicio «se concedió a la propuesta más beneficiosa de las cuatro que se presentaron ya que era la más económica». Asimismo apuntan que la reunión previa con los padres, que criticó el PP, «se realizó por parte de la concejal de Educación, María Asunción Salinas, y no por la empresa».
Los monitores contratados para la escuela de verano son vecinos de Catral, a los que se les tuvo en cuenta «la formación, la experiencia, la situación económica y que estaban inscritos como demandantes de empleo en el Registro de Empleo municipal», confirman en un comunicado.
Por otra parte el tripartito apoya la correcta adjudicación de este servicio, porque «se adjudicó en la Junta de Gobierno Local del día 28 de junio y dio comienzo el día 1 de julio». En este sentido, confirman que esta actividad reúne todos los requisitos en cuanto a edad de los usuarios.

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