La plataforma que busca enclaves incontrolados sitúa las escombreras en los municipios de Catral, Callosa, San Isidro, Granja de Rocamora y Dolores.
La Plataforma Anticorrupción Defensa de la Huerta denunció ayer la existencia de nuevos vertederos que, a su juicio, podrían ser «incontrolados e ilegales» en los municipios de Callosa de Segura, Catral, Dolores, Granja de Rocamora y San Isidro. Estos vertederos, según el secretario general de la entidad, Moisés Cruz, son consecuencia del boom urbanístico surgido en la Vega Baja hace unos años y «siguen operativos en la actualidad», añadió.
Cruz estimó que hay alrededor de 150 vertederos ilegales de distintos tamaños en la comarca, los cuales están distribuidos entre los veintisiete municipios que la conforman. La plataforma recorre desde hace varios años la Vega Baja en busca de enclaves presuntamente «incontrolados» y, por ello, hicieron públicos nuevos vertederos formados, según fuentes del colectivo, por «escombros, muebles, neumáticos o basura en general».
Uno de ellos está localizado en la vereda Sobreviñas, en plena huerta de Dolores, donde la plataforma afirma haber encontrado, a lo largo de una distancia de unos quinientos metros, «decenas de toneladas de escombros camufladas entre vegetación silvestre». En este sentido miembros del colectivo señalaron que «sin duda, desde que recorremos la huerta tradicional de la Vega Baja, este es el mayor vertedero ilegal hallado hasta la fecha».
La entidad sostiene que otro de los municipios donde han encontrado vertederos de ese tipo es el de Callosa de Segura. En concreto, en el polígono industrial San Roque, ubicado en la carretera CV-913, donde, según manifestaron desde la plataforma, hay hasta «cuatro parcelas repletas de vertidos que, en lugar de atraer empresarios, los aleja».
Una situación parecida se registra en el paraje denominado Cabezo de las Fuentes. La Plataforma Anticorrupción Defensa de la Huerta explicó que este vertedero ocupa 12,6 hectáreas y está situado entre los términos municipales de Granja de Rocamora y San Isidro. En ese enclave, calificado como protegido y microreserva de flora, «se han detectado hasta cuatro vertederos ilegales de grandes proporciones», denunció. Asimismo añadió que este espacio se trata de un cabezo aislado, de composición secundaria de pizarra y calizas, rodeado de saladares y palmeras, donde hubo excavaciones arqueológicas en las cuales se descubrió un yacimiento íbero. No obstante, este emplazamiento ha sufrido «varios incendios en sus alrededores durante los últimos años a consecuencia de los vertidos allí acumulados».
San Isidro es otra de las poblaciones de la Vega Baja que cuenta con presuntos vertederos ilegales. Desde el colectivo detallaron que en este caso, el vertedero está en la zona conocida como los Lagos de San Isidro, un manantial de agua situado en un pequeño montículo de la carretera que une esa localidad con Catral y, que años atrás «era frecuentado por vecinos para darse un baño en verano». En relación a este asunto, señalaron que, a día de hoy, esos lagos albergan en sus aguas «neumáticos, botellas de cristal, plásticos y basuras en general».
Por otra parte, en el camino de El Hondo de Catral, el colectivo ha descubierto un posible vertedero de gran envergadura, «establecido desde hace al menos siete años» en el perímetro de protección del parque natural de El Hondo.
Estos cinco municipios se unen así a otras localidades de la comarca, como Orihuela, Torrevieja o Benejúzar, donde la plataforma ha denunciado en numerosas ocasiones la existencia también de presuntos vertederos incontrolados e ilegales.
